CCOO CyL se felicita de que el Ministerio dotará de seguridad a algunos Juzgados de Primera Instancia e Instrucción
El Sector de Justicia de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO de Castilla y León ha mostrado su satisfacción tras conocer que "después de más de siete años de lucha", el Ministerio del ramo, a partir del 1 de abril de este año, dotará de vigilancia de seguridad de forma presencial a algunos Juzgados de Primera Instancia e Instrucción únicos de localidades de la Comunidad.
Desde el año 2016, y después de múltiples denuncias ante los Comités de Salud Laboral, ante el Ministerio de Justicia y ante la Inspección de Trabajo, CCOO se felicita de haber conseguido que por fin estos juzgados tengan un vigilante de seguridad de forma presencial. Esta vigilancia la llevará a cabo personal de la Guardia Civil en la reserva gracias a un convenio con el Ministerio de Interior.
El sindicato, según informa, pudo comprobar que este problema prácticamente sólo lo padecían las sedes judiciales de Castilla y León. Por ahora sólo el Juzgado de Vitigudino en Salamanca y tres Juzgados de León tendrán este tipo de vigilancia: Cistierna, Sahagún y Villablino, aunque también ha tenido conocimiento de que el Juzgado de Almazán en Soria y el de Arévalo en Ávila tendrán vigilancia presencial a partir de una fecha sin concretar de abril o mayo.
En Puebla de Sanabria, a partir de abril, también tendrán un vigilante de una empresa de seguridad privada, aunque, según el Ministerio, parece ser que será de forma temporal por unos problemas que han tenido en estos días. No obstante, CCOO reivindica la cobertura continua pues se ha detectado que el problema no es puntual y sí permanente.
Aún quedan varias sedes de Juzgados únicos en Castilla y León sin vigilancia y se queja de que el Ministerio no ha explicado por qué no se protegen. Estas sedes son Toro, en Zamora; Santa María la Real de Nieva, Cuéllar y Sepúlveda, en Segovia; Medina de Rioseco, en Valladolid; Burgo de Osma, en Soria; Piedrahíta, en Ávila; y Sala de los Infantes, Lerma y Briviesca, en Burgos.
Desde el año 2017, CCOO ha estado interponiendo denuncias ante la Inspección de Trabajo para que se pusiera fin a estas situaciones de desprotección, para que de forma inmediata se dotara de seguridad presencial y del resto de medidas necesarias (cámaras, arco y escáner), todo ello para evitar agresiones y garantizar una mínima seguridad a los trabajadores y a los propios ciudadanos que acuden a estos juzgados.
Advierte de que estas denuncias siempre han sido ganadas por este sindicato pero el Ministerio no las ejecutaba.
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